lunes, 14 de enero de 2013

Fiesta en el camarote de los Cure

                                 Dibujo de Universo Pamp.

Iba a ser un homenaje a la banda más grande, y decidimos interpretar sus mejores canciones. El local era pequeño, y el escenario mucho más. Por primera vez, maldije el día que Roberto incluyó un tercer guitarrista en el grupo. Juantxo estaba arrinconado y le costaba aporrear la batería, Chimo se andaba con cuidado para no golpearnos con el mástil del bajo, y Pedrote no pudo hacer su solo de guitarra. La acústica del lugar era patética, pero la gente estaba encantada, lo único era que no podían alzar los brazos, pues nos tapaban la vista. Un gracioso del público quiso subir a preguntar por su tía Micaela, pero, por suerte, no había sitio en el escenario. Rogelio, escondido tras el teclado, pidió dos huevos duros.
No sé si la actuación estuvo bien, pero en aquel pequeño espacio nos sentimos grandes.
Al final, los chicos lloraron.

3 comentarios:

  1. El sábado estuve en una fiesta homenaje a The Cure, y me lo pasé muy bien. Cierto es que no soy un fan Robert Smith y sus muchachos, y no les voy a dedicar este relato, se lo dedico a todos sus fans y grupos tributarios que hacen posibles estas fiestas, y que el grupo sea tan grande.

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  2. Robert Smith, roooobert smitttthhh.

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  3. Qué bueno! me encanta eso de que los chicos lloren. Me gustan los chicos que lloran.
    Estupendo!

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